The Chronic 2001 de Dr. Dre siempre me ha producido sensaciones enfrentadas: no deja de ser uno de mis discos favoritos, bien cerquita de los Beatles, Dylan, Coltrane o Baez, y sin duda alguna sería uno de esos discos que me llevaría a una isla desierta, pero claro, no hace falta saber mucho inglés ni prestar mucha atención a las letras para darse cuenta de que el elenco de estrellas del rap que aparecen en el disco no están diciendo cosas muy bonitas. Y si encima prestas atención a las letras y sabes mucho inglés, entonces se te quedan los ojos como platos. Atención a frases como "I'll be catching bitches while bitches be catching feelings"; "Now you wanna run around talking bout guns like I ain't got none, what you think I sold'em all?", "Wanna resolve things in a bloddier way? Just study your tape of NWA"; "Now that I'm sober you ain't that fine". Joder, hay una canción que se llama "Fuck you" y empieza con la mujer de uno de los raperos dejando un mensaje en el contestador de éste y diciéndole entre lágrimas lo mucho que lo quiere y que lo echa de menos y pidiéndole que, por favor, vuelva a casa, y justo cuando acaba el mensaje empieza el tipo en cuestión a rapear de esta guisa: "I just wanna fuck bad bitches. All them nights I never had bitches, now I'm all up in that ass, bitches"; ¿no es eso de lo más cruel y denigrante que habéis oído nunca en un disco? (Ojo, será menos poético y más explícito, pero no es mucho más cruel que Dylan diciendo "I ain't saying you treated me unkind (...) you just kinda wasted my precious time").
Y, sin embargo, nunca me cansaré de escuchar este disco, un disco extremadamente cruel, sexista y violento, pero uno de los mejores discos de los '90 y desde luego uno de los mejores discos de la historia del hip-hop. El disco que catapultó a la fama a Eminem con el acelerado estribillo que yo repetía de memoria en el recreo a los 16, el disco con el inmortal himno "Still D.R.E." (con un vídeo de gangsta-rap que cumple todos los cánones). No sé cómo transimitir de forma precisa la calidad musical de este álbum, pero ayuda saber que la mayoría de los sampleos de las bases no son sampleos en sentido estricto, debido a las malas experiencias que Dr. Dre tuvo con los derechos de autor, sino fragmentos "inspirados" en otras canciones y reinterpretados con instrumentos reales; y el hecho de que el mejor de estos "sampleos" y uno de los mejores de todos los tiempos no sea de James Brown ni de Sly & The Family Stone, sino de Charles Aznavour, da una idea aproximada de lo que quiero decir.
Pero después de ver The Wire ya no es sólo por su calidad musical por lo que admiro este disco, sino también por su contenido, por raro que esto suene. "The Chronic 2001" se me antoja un reflejo perfecto de la realidad que viven millones de afroamericanos en los projects. Si podemos admirar y alabar "El corazón de las tinieblas" o "Salvar al Soldado Ryan" pese a las barbaridades que en ellos leemos o vemos, barbaridades que fueron absolutamente reales, no veo por qué no podemos alabar e incluso admirar este álbum de uno de los mejores productores de hip-hop, por violenta, sexista y cruel que sea la realidad que oímos en él. (Sí, acabo de comparar a Dr. Dre con Conrad y con Spielberg. El que esté libre de pecado que me tire la primera piedra).
Como dije al empezar, viendo The Wire he aprendido otras muchas cosas aparte de apreciar la realidad de las letras de los gangstas, como que no se debe ir a una fiesta si no se tiene la intención de tocar alguna teta o que no se debe viajar por medio mundo sin hablar puto inglés, y otras muchas más como las que muestra el siguiente video. The Wire y Dr. Dre deberían ser asignaturas troncales en la carrera de la vida. He dicho.